A la sexy Isabella De Laa no le gusta limpiar el piso ni lavar la ropa, pero lo hace todos los días porque le encanta vivir en un lugar limpio y bonito. Así que se arrodilla para sacar la ropa de la lavadora cuando su novio entra en la habitación. Ve a su preciosa novia en posición de perrito y no puede resistir la tentación de meterle la lengua en el coño y el culo. Claro, Isabella De Laa se sorprende e intenta que él se vaya para poder terminar con todas esas cosas aburridas, pero luego cambia de opinión por completo. Ella está de acuerdo en que es mucho más placentero jugar con la polla de su muchacho en lugar de lavarla y tal vez incluso plancharla más tarde.
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